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MARIDAR CON CERVEZA

MARIDAR CON CERVEZA

INFINITAS POSIBILIDADES GASTRONÓMICAS

Hay numerosas variantes de cervezas, con mayor o menor graduación alcohólica y presentan un color entre el ámbar hasta el rojizo o incluso el negro.

El mercado se está abriendo a las infinitas posibilidades gastronómicas que ofrece esta bebida, y la figura del sommelier de cervezas es un puesto cada vez más requerido en los restaurantes sofisticados.

¿Por qué preferir la cerveza al vino?

– Hay mucha más variedad entre los diferentes sabores y estilos de la cerveza que los del vino. Hay más opciones donde escoger.

– La cerveza es más refrescante y quita más la sed que el vino, hecho importante a la hora de degustar picante o comidas muy pesadas.

– Si se bebe la misma cantidad de vino que de cerveza, ésta última tiene menos alcohol y calorías que el vino.

– La cerveza gana por goleada al vino en los ácidos maridajes. No muchos platos aliñados con vinagre, o a base de ciertos alimentos como son las alcachofas se pueden acompañar de vino.

–  Incluso la cerveza más cara puede ser más asequible que algunos caldos. La cerveza es más barata que el vino.

Como hay cervezas más amargas, más dulces, más frutales o con más cuerpo,  esta bebida puede maridar con una amplia variedad de platos.  Gracias a la carbonatación de la cerveza es posible levantar los delicados gustos de los quesos y carnes, por ejemplo, consiguiendo así experiencias sensoriales sumamente satisfactorias.

Sin entrar en tipos de cerveza concretos (Lager Ale, Porter….), lo más divertido es dejarse llevar por la intuición y el gusto personal.

Cómo maridar

Picantes y especiados: La cerveza alivia la sensación que produce en el paladar los platos muy picantes o condimentados de una manera muy fuerte; aguanta muy bien la agresión del pimentón y el ajo.

Agridulce: La cerveza es la bebida ideal para comer una hamburguesa con kétchup y mostaza. (salsa ácida y agresiva) Las comidas orientales, con salsas de soja o el picante wasabi se realzan con cerveza.

Carne: Si se quiere beber cerveza en un asado o parrilla, hay que tener en cuenta que cuanto más fuerte sea el condimento para sazonar,  mayor cuerpo debe tener la cerveza. Cuanto más oscura, mejor.

Los sabores tostados de las carnes a la plancha armonizan perfectamente con cervezas de cuerpo medio.

Pescados: Las cervezas armonizan muy bien con el graso pescado azul, los marinados, ahumados y en salazón.

Alimentos ácidos y amargos: La cerveza contrasta con la acidez del vinagre, por lo que combina muy bien con ensaladas, salpicones de marisco y escabeches.  Por este mismo motivo, es fácil maridar con platos con tomate o verduras amargas.

Quesos y huevos: La cerveza limpia el paladar, así que es un acompañamiento óptimo de los platos con textura untuosa.

Chocolate: La cerveza negra es una excelente compañera para los platos cuyo principal ingrediente sea el chocolate, por su gusto a regaliz y frutos secos.

La cerveza sin alcohol: excelente para tomar con pescados fritos o encurtidos. Ofrecen una alternativa refrescante a sabores fuertes como pueden ser morcillas o quesos curados.  Por su ligereza, son la compañía perfecta para platos suaves como paellas vegetarianas o tostas con aceite.

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